"Escalamos con polleras porque es parte de quienes somos, es parte de nuestra identidad" dice Elena, una mujer boliviana que una vez soñaba con escalar montañas mientras miraba las colinas, una vívida postal de las tierras andinas de Bolivia.

Pasaron los años, y Elena no solo creció, sino que también se convirtió en el rostro visible de un grupo de mujeres bolivianas que escalan montañas en todo el mundo. Estamos hablando de las Cholitas Escaladoras, un grupo de mujeres increíbles que forman parte de una de las culturas indígenas presentes en Bolivia, los Aymaras. 14 mujeres escaladoras comparten su orgullo al alcanzar las cimas más altas mientras visten sus ropas ancestrales y abrazan su identidad Aymara.

Nuestro equipo tuvo la oportunidad de entrevistar a Elena y fue una experiencia emocionante. Cuando le preguntamos sobre los inicios de las Cholitas, ella dijo: “La primera vez que escalé, fue por diversión o para saber cómo se siente estar en la cima. Luego formamos un grupo para escalar 8 montañas de más de 6,000 metros sobre el nivel del mar. Sin embargo, muchas personas nos criticaron a nosotras, las mujeres, diciendo que no podríamos escalar porque la nieve se derretiría y fracasaríamos. Sufrimos mucha discriminación, pero eso nos hizo más fuertes para conquistar más montañas. Ahora, hemos logrado conquistar montañas en Bolivia, Chile y Argentina, rompiendo barreras y estereotipos. Somos mujeres empoderadas, y lo demostramos con acciones, no con palabras”.

Decimos Pachamama y no Tierra porque en su cultura hablan más de Pacha que de Tierra. “Para nosotros, las montañas son sagradas. Por eso, antes de escalar una montaña, pedimos permiso ofreciendo regalos a los Achachilas, que son las montañas, y a Pachamama, que es la Madre Tierra”, dice Elena. Es una conexión especial que se remonta a tiempos ancestrales y se ha convertido en uno de los aspectos definitorios para las Cholitas. Detrás de esa conexión y lucha incansable hay mujeres que han desafiado al machismo durante años, que busca restringir la libertad y la fuerza de las mujeres.

El Monte Everest es su próximo destino, y la convicción de Elena al hablar hace que cualquiera que la escuche sienta que lo lograrán: “Para el Everest, estamos planeando una expedición de abril a junio de 2025. Participarán cuatro Cholitas, de 27, 30, 38 y 40 años. La expedición durará aproximadamente tres meses, y es posible que se realice un documental o película, "Cholitas en el Everest". Esta expedición incluirá guías Sherpa, porteadores Sherpa, cocineros, camarógrafos y asistentes de campamento. También seguiremos todas las reglas necesarias, escalando con cuerdas fijas y usando oxígeno.” El grupo lanzó una campaña de recaudación de fondos en https://gofund.me/45860404 para hacer realidad su sueño.

Las Cholitas no solo están haciendo un cambio en el presente, sino que también están construyendo un legado a través de su influencia e inspiración para otras mujeres en Bolivia. Esto se refleja en las palabras de Elena: “En nuestro grupo, somos 14 Cholitas, pero hay nuevas generaciones a las que enseñamos, como nuestras hijas, sobrinas o nietas. Cuando nos ven en las redes sociales o en la televisión, nos dicen que también quieren convertirse en escaladoras Cholitas.”

Las Cholitas tienen el mérito de desafiar las visiones tradicionales sobre las mujeres, y el mensaje más importante es que están dispuestas a seguir haciéndolo, ahora apuntando a la montaña más alta del mundo.